...Ahora solo tenían
que probar si con aquel sencillo pero efectivo método, podrían traducir el
suyo.
Utilizaron el
mismo método y fue surgiendo ante las mirada atónitas de ambas, un texto
legible aunque sin sentido. En aquel instante Elsa comprendió que su siguiente
destino debía ser la isla. Urdieron un plan para apropiarse del velero del
padre de Hanna y se embarcaron en el sueño que Elsa llevaba toda una vida
esperando.
Salieron por la
mañana de madrugada antes que el sol comenzara a salir por el horizonte, sabían
que tardarían más de seis horas en llegar y una vez en la isla buscar una pista
para terminar de descifrar el mapa.
La travesía fue
tranquila, la mar en calma hizo que el viaje fuera como el que tantas veces,
siendo niña, había imaginado. Al llegar a la isla, fondearon cerca de la única
cala pedregosa que permitía un acceso y con el pequeño bote desembarcaron. La
isla como le había contado Hanna, era estéril y árida. Elsa con el mapa en la
mano, recorrió de un lado a otro de la isla buscando algo que le diera una
pista para poder entender por fin aquel misterio que le llego del mar siendo tan
sólo una niña.
─¿Elsa que es lo
que buscamos?
─No se, una
tumba, un túmulo, o algo parecido. La tumba del rey.
─Aquí ya te he
dicho que no hay nada.
─Pero el texto
habla de “donde muere el Rey”
Elsa y su amiga siguieron
explorando la isla sin encontrar nada. Tenían que tomar una decisión regresar o
permanecer más tiempo y pasar la noche en la isla. A Elsa esa opción le pareció
sin lugar a dudas la mejor. Si unos días a tras, alguien le hubiera dicho que pasaría
una noche en una autentica isla de piratas, no le habría creído. Regresaron al
velero para recoger víveres y preparar el campamento. Una vez de vuelta,
buscaron las maderas que el mar había arrebatado de cada naufragio y
encendieron el fuego. En el calor de la
hoguera hablaron de sus sueños futuros y observaron uno de los atardeceres mas
bellos que nunca habían visto y fue entonces cuando Elsa por fin pudo comprender
el significado de aquel texto.
─¡El sol!
─Si, que pasa.
─Donde muere el
Rey, el astro Rey. La puesta de Sol.
─Donde muere el
Rey, se esconde el inicio del camino.
Hanna y Elsa
cogieron las linternas y corrieron hacia la puesta de sol. Al llegar observaron
que la tierra se adentraba en el mar como si de un cabo se tratase y era justo
donde el Sol moría. Caminaron hasta tocar el agua y barrieron el suelo con las
linternas buscando el inicio del camino. Al pisar una de las enormes piedras,
está se movió y pudieron ver que por las juntas había una oquedad. Con la ayuda
de un listón de madera pudieron moverla lo suficiente, para poder entrar en la
cueva. Elsa pensó que el corazón se le iba a salir. Caminaron juntas por el
estrecho pasadizo y al final descubrieron un cofre que al abrirlo cambiaria sus
vidas para siempre.
Estupenda!! Te deja con ganas de más!!
ResponderEliminarEva
Me ha gustado mucho , pero lo que no me ha gustado es que nos dejes con la intriga de qué es lo que había en el cofre.... eso no se hace.........
ResponderEliminarM.V.M